¿Cómo?, ¿ya vas a guardar el traje de baño? ¡Pero el verano aún no termina! Ah, se trata más bien de esa “piel de naranja” que se asoma en tus piernas y glúteos lo que te incomoda, ¿cierto? Sabemos que la celulitis es un problema cuando de imagen personal se trata. Puede ser que no sea grave, o puede ser que ya no te permita siquiera usar leggings para ir al gimnasio, sea cual sea el caso, aquí te decimos cuál es el mejor tratamiento para reducir la molesta celulitis, sobre todo, de tus piernas y glúteos.
Tipos de celulitis
Lo primero que hay que saber es, ¿qué genera la celulitis?, debes de saber que el cuerpo humano acumula dos tipos de tejido adiposo:
- Grasa parda: tiene como objetivo quemar calorías para transformarlas en calor y energía, y es la que comúnmente se encuentra en las personas que se encuentran en su peso y complexión.
- Grasa blanca: se encarga de acumular la energía “extra” que ingerimos pero no gastamos (sí, esa de los taquitos al pastor antes de ir a dormir), y aunque gracias a ella el ser humano ha sobrevivido a condiciones extremas durante años, también es la responsable de que se formen esos hoyuelos en la piel que cubre tus piernas y glúteos.
Ahora bien, ¿todos tenemos la misma celulitis y en los mismos lugares? Lo cierto es que cada piel es diferente y, aunque la piel de naranja es provocada por la grasa que se acumula debajo de la piel, no hay una celulitis igual a otra. Sin embargo, sí hay tipos establecidos que a continuación te describimos.
- Celulitis dura: se encuentra principalmente en los muslos y glúteos; su característica es que endurece la piel provocando incluso dolor al tacto, pero le da una apariencia rugosa y puede generar además estrías. Se vincula principalmente con desórdenes hormonales por lo que, puedes tener buena actividad física y aun así, presentar este tipo de celulitis. No es visible a simple vista, sino cuando se pellizca la piel.
- Celulitis blanda: en este caso, la “piel de naranja” puede verse a simple vista; aparece sobre todo en mujeres mayores de 35 años, con factores de riesgo como pueden ser un antecedente genético, sobrepeso o variantes pronunciadas del mismo, en poco tiempo. Puede observarse en lugares como brazos, abdomen y espalda, además de muslos y glúteos.
- Celulitis edematosa: se trata de un caso más grave pues, sumado a la celulitis, se presentan edemas, es decir, retención de líquidos. Este tipo de celulitis puede verse en las piernas, principalmente en la zona lateral de los muslos, y en los glúteos. Puede aparecer en la adolescencia o después de los 40 años, a causa de la mala circulación o el mal funcionamiento del sistema linfático; sin embargo, la acumulación excesiva de grasa y la falta de actividad también son un factor de riesgo importante. Esta condición es dolorosa y puede significar hasta dificultad para moverte.
Y, ¿luego?, ¿cómo le hago para desaparecer la celulitis de glúteos y piernas?
Para reducir y eliminar la celulitis en piernas y glúteos, es necesario una fórmula combinada que incluya una buena alimentación, ejercicio y un tratamiento estético no invasivo. Nos referimos a cosas básicas como evitar ingerir más carbohidratos de los que utilizas para tu actividad diaria, así como optar por aquellos que tengan un bajo índice glucémico. Ejercicio regular, sobre todo, con rutinas enfocadas a la zonas de mayor riesgo de aparición de celulitis, es decir, glúteos y piernas, como sentadillas y las planchas; y cremas anticelulitis combinadas con tratamientos como BodyPerfect, un método basado en tres tecnologías: radiofrecuencia, luz infrarroja y rodillos giratorios que a través de ondas electromagnéticas calientan el tejido y diluyen la grasa para que el cuerpo se deshaga de ella naturalmente.
La radiofrecuencia, no invasiva e indolora, reafirma la piel a través de ondas que emiten calor, favoreciendo el drenaje linfático, es decir, la eliminación de toxinas y desechos; la circulación sanguínea en el tejido graso para disminuirlo; y la formación de nuevo colágeno.
La luz infrarroja ayuda a limpiar la piel a través de rayos infrarrojos que fomentan la oxigenación de las células.
Los rodillos giratorios combaten la flacidez de la piel y ayudan a moldear el cuerpo, con un masaje reductivo, disminuyendo el tejido graso y, por consiguiente, la celulitis.
¿Te dieron ganas de probarlo? Agenda una cita en el centro BodyBrite que tengas más cerca y, ¡comienza a experimentar el cambio!